Personalidad
- Extrovertido
- Afectuoso
- Curioso
- Calmado
Características
El gato persa de pelo largo es fácilmente reconocible por su pelaje, cabeza redondeada, pómulos prominentes y cara aplastada. Los ojos son grandes, muy expresivos en contraste con las orejas pequeñas y redondeadas. Raza de tamaño medio, musculoso y redondeado. Patas cortas, gruesas y fuertes, con grandes zarpas. Abundante pelaje, abundante y espeso, de tacto suave; de colores muy variados, habitualmente monocolor, aunque existen bicolores, incluso tricolores en caso de las hembras. Su cola es corta y tupida.
Comportamiento
El gato persa es un gato muy familiar y tranquilo. Habitualmente lo encontramos tumbado o dormido. Pasa gran parte del día descansando. Es un gato doméstico, nada salvaje. Además, observaremos que el gato persa es muy presumido y ostentoso, sabe que es un animal hermoso y no dudará en pavonearse varias veces por delante nuestro para conseguir caricias y atenciones.
Es un gato familiar, le gusta estar acompañado, incluso de niños y otros animales. A pesar de ser familiar, no le importa ser el único gato y centro de atención de la casa. Se trata de un gato muy goloso.
Cuidados
Es muy importante cepillarle a diario su largo y grueso pelaje, evitaremos enredos, nudos y bolas de pelo en el estómago. Conviene bañarlos si está muy sucio para prevenir suciedad y enredos.
Hay que vigilar sus ojos y limpiar sus lagrimales de forma periódica. Debido a su cara plana sus ojos lagrimean bastante y es conviene limpiarlos regularmente con una gasa estéril humedecida con suero fisiológico, así como los lados de la nariz.
En el mercado encontraremos productos específicos para los persas que sirven para cuidar su pelaje, la limpieza de los lagrimales o de los oídos. Se debe prestar atención también a su zona anal.
La obesidad es un problema muy grave en la raza persa que a veces se manifiesta tras la esterilización. Es recomendable acudir al veterinario y consultar el tipo de alimento adecuado.
Salud
Es una raza propensa a varios problemas de salud.
Dado que la forma de la cabeza se ha reducido y la cara se ha aplastado, pueden existir malformaciones de mandíbula que produzcan enfermedades dentales y posibles dificultades para alimentarse. El pequeño tamaño de las fosas nasales y un velo del paladar demasiado largo pueden provocar también serios problemas respiratorios. Es posible que los conductos lagrimales no sigan su curso natural, por lo que los ojos llorarán y humedecerán la cara constantemente, lo que puede provocar erupciones cutáneas y llagas en la cara. La naturaleza plana de la cara incrementa también la probabilidad de enfermedades oculares.
Los persas también pueden tener una mayor incidencia de miocardiopatía hipertrófica (engrosamiento de las paredes del corazón).
El gato persa de pelo largo es propenso a sufrir por culpa de la enfermedad poliquística renal o el síntoma de los testículos retenidos. Cerca de un tercio de los gatos persas lo padecen.
Otras enfermedades que pueden afectar a tu gato persa son:
- Toxoplasmosis
- Abortos en el caso de gatos azules
- Malformaciones en el caso de gatos azules
- Maloclusión
- El síndrome de Chediak-Higashi
- Anquilobléfaron congénita
- Entopion
- Epífora congénita
- Glaucoma primario
- Dermatitis del pliegue cutáneo
- Cálculos en las vías urinarias
- Luxación de la rótula
- Displasia de cadera